Tesis sobre Las izquierdas día 24

PLAYERAS y Foros autogestivos

Entre la ropa que más he apreciado y usado en mi vida están las playeras de Las izquierdas en todas sus variedades: amplias y verdes, tipo ombliguera por su pequeño tamaño, elegantes amarillas, cómodas de trabajo ya sea en blanco o en negro, rojas tamaño hombre, hasta thank tops verde militar o blusitas interiores cafés. Me gustaba ponérmelas para realizar cualquier tipo de actividad: caminar, dormir, entrenar, ensayar, ir al escuela, visitar amigos o familia, etc.

«En este campo del diseño y la fabricación para satisfacer las sencillas necesidades de la vida, se supone que todo miembro de la comunidad no sólo puede aprender a producir, sino que también puede, mediante el diseño y la decoración, dar una expresión individual y única a su trabajo. Ahora bien, esta autoexpresión viene gobernada en primer lugar por el proceso de aprendizaje del oficio y en segundo lugar por las exigencias de la funcionalidad. La posibilidad de que un miembro de la comunidad aporte innovaciones en numerosos niveles de la expresión visual transluce una especie de implicación y participación que se ha marchitado en el mundo moderno, proceso que se ha visto acelerado por numerosos factores entre los cuales hay que destacar el concepto contemporáneo de «bellas artes.» (Dondis:1992;15)

Hablando del diseño y fabricación de objetos de primera necesidad, como la ropa, no es una parte arraigada de nuestra cultura tomarnos el derecho de construir desde cero o de simplemente modificar las prendas que compramos. Sin embargo, puede resultar un acto cargado de expresión estética y de empoderamiento sobre algo tan dado por hecho como lo son los estampados de la ropa que utilizamos a diario.

Además, el procedimiento de la serigrafía resulta una técnica sumamente accesible, que no requiere de complejas instrucciones ni de materiales difíciles de conseguir o de elevados precios. Básicamente se trata de hacer un dibujo en negro directamente sobre una lámina de acetato o en una hoja al tamaño final que se quiere para estampar. Luego se le puede encargar la hechura del marco a un profesional al que se le lleva el dibujo (ya que esta parte del procedimiento sí requiere de más condiciones especiales). Pero ya una vez teniendo el marco hecho, la reproductibilidad de nuestro dibujo es infinita.

«[Los fines de la alfabetidad visual] son los mismos que los que motivaron al desarrollo del lenguaje escrito: construir un sistema básico para el aprendizaje, la identificación, la creación y la comprensión de mensajes visuales que sean manejables por todo el mundo, y no sólo por los especialmente adiestrados como el diseñador, al artista, el artesano o el esteta.» (Dondis:1992;11)

Es importante, en nuestros días cargados de publicidad y de medios tan integrados a nuestro paisaje, defender el derecho de réplica en el campo del lenguaje visual. No atreverse a expresar visualmente nuestros pensamientos sería equivalente a estar rodeados de seres que nos gritan qué hacer y permanecer mudos ante eso.

«La fuerza cultural y planetaria del cine, la fotografía y la televisión en la confirmación de la imagen que el hombre tiene de sí mismo, define la urgencia de la eseñanza de la alfabetidad visual tanto para los comunicadores como para los comunicados.» (Dondis:1992;12)

Una simple playera como soporte de las imágenes que producen nuestras comunidades puede marcar ese paso entre la mirada pasiva y el rol activo de la comunicación.

Si aprendemos a ver las estructuras subyacentes de los mensajes visuales con los que constantemente somos acosados, ya no seremos presas tan fáciles de los mensajes que la publicidad y los medios masivos buscan imponernos. Podremos elaborar los nuestros y compartirlos.

«…el conocimiento del comportamiento de estos elementos básicos de la percepción visual es también interesante para todos aquellos que sin ser ellos mismos productores de obras visuales, se preocupan o interesan por unos sistemas de comunicación que constituyen, posiblemente, una de las características de la sociedad actual.» (Dondis:1992;6)

Cabe mencionar que en la historia de Las izquierdas, la primera vez que consideramos que necesitábamos llevar playeras para vender después de un show, fue cuando nos presentamos por primera vez en el Multiforo Cultural Alicia.

Este lugar es un símbolo de autogestión exitosa y de autonomía y comunidad en el submundo de la música local de la Ciudad de México. El hecho de que nuestra banda tocara ahí significaba que su existencia se oficializaba en la historia, ya que tendríamos un cartelote con nuestro nombre pegado en diferentes muros de toda la ciudad.

El modo de operar del Alicia se basa en vender cerveza a un precio accesible y en permitir libertad creativa a los organizadores de los eventos. Las razones que empujan al colectivo van más allá del dominio, el poder, los honores y demás. Se trata más bien de un foco de reunión refrescante por su misma austeridad. Hay lo necesario, pero no se pretende más que eso. El foro evoluciona al ritmo de los proyectos que lo habitan cada fin de semana, no al ritmo de cualquier otro bar o escenario existente.

«La resistencia se aleja de toda forma de reacción, jamás es reactiva. Es una fuerza activa que afirma su propia diferencia, la afirmación siempre es primero y la negación no es más que una consecuencia. Las fuerzas reactivas, por su parte, se oponen a todo lo que ellas no son, buscan limitar lo otro, no aceptan la diferencia; para lo diferente y anómalo la asimilación o bien el exterminio; en las fuerzas reactivas la negación es lo primero, y negando llegan a una apariencia de afirmación.» (Resistencia: 2004;32)

El Alicia está abierto desde 1995. Desde aquel entonces ha cultivado el arte del cartel, logrando una identidad y un sello estético que se reconoce inmediatamente, ya sea tratándose de publicidad para sus eventos, o de mensajes sobre problemáticas vigentes en las relaciones sociales.

«Resistencia y reacción tienden a ser confundidas… La reacción no sólo puede hallarse en las fuerzas que ejercen el poder, también puede anclarse en ciertos grupos o individuos que lo sufren y padecen, para ellos resistir tiene otra significación: es «querer el poder, desear dominar, atribuirse o hacerse atruibuir los valores establecidos, dinero, honores, poder. En ellos, a pesar de no pertenecer a las fuerzas que ejercitan el poder, no se juega la resistencia, sino el resentimiento, quieren hallarse del otro lado, late en ellos el deseo incontrolable de ubicarse en el campo del dominio.» (Resistencia:2004;32)

Dado que el Alicia lleva 21 años abierto, y ninguno de sus colaboradores se ha hecho abiertamente millonario, y a la fecha aún tienen que lidiar con legislaciones absurdas que, al no comprender la naturaleza del lugar, pretenden aplicarles las mismas reglas que se aplican a los bares que tienen como fin primero el lucro.

«De allí que la resistencia juegue con el tiempo, se vuelva inactual, lugar fuera de lugar, tiempo fuera de tiempo: actúa en un presente por un tiempo aún por venir; es un acto presente contra el presente y contra todas las formas eternizadas del pasado en favor de un tiempo futuro. La resistencia está contra el presente, contra «este» tiempo y construye en presente el tiempo por venir, que se abre en el acto mismo resistente, surge como posibilidad, como sueño y deseo, como gesto que se aventura hacia un mañana.» (Resistencia:2004;33)

Más información sobre el Multiforo Cultural Alicia:

http://musicacontraelpoder.blogspot.mx/

http://multiforoalicia.blogspot.mx/