Lawlor, R. (1982). Sacred geometry. London: Thames & Hudson.
El universo perceptible entero está compuesto de vibraciones, percibidas como fenómenos de onda. Las ondas son patrones
temporales puros, que son configuraciones dinámicas compuestas por amplitud, intervalos y frecuencia (pag 12)
Todo cuerpo vivo vibra físicamente… y todo cuerpo vibrante emite un sonido. El estudio del sonido, como los antiguos intuyeron, provee una clave para la comprensión del universo (pag 13)
Era por medio de la geometría que los pitagóricos se ponían en equilibrio en esta transición única en que la vibración escuchada se convierte en forma a la vista. Aunque estén entretejidos en su función,
nuestros dos sentidos más intelectuales, la vista y el oído, usan nuestra inteligencia en dos modos completamente diferentes. Por ejemplo, con nuestra inteligencia óptica, para formar un pensamiento
hacemos una imagen en nuestras mentes. El oído, por el otro lado, usa la mente en una respuesta inmediata sin imagen que tiene acción expansiva, evocando una respuesta de los centros emotivos.
En estos días esta facultad emotiva, sensible al sonido está asociada con experiencias subjetivas, emocionales, estéticas o espirituales.
Tendemos a olvidar que también se involucra cuando la razón percibe relaciones invariantes. Entonces cuando situamos la capacidad auditiva en el centro de nuestra experiencia sensitiva nos podemos
dar cuenta de que es posible escuchar un sonido o un movimiento… Es esta capacidad, que está asociada con el hemisferio derecho del cerebro, la que reconoce patrones en el espacio, o totalidades de
cualquier tipo. Puede percibir opuestos en simultaneidad y comprende funciones que le parecen irracionales a la facultad analítica (ver más en otro momento, pag 14)
Esta cualidad intelectual se asemeja mucho a lo que los griegos llamaban Razón Pura, o lo que en la India se conoce como ‘la mente-corazón (the hearth-mind)’. Los antiguos egipcios tenían un hermoso
nombre para ella, la Inteligencia del corazón, y alcanzar esta calidad de comprensión era la meta implícita de la vida.
La práctica de la Geometría, mientras también utiliza la facultad analítica, usa y cultiva este aspecto auditivo e intuitivo de la mente (pag 14)
Cada diagrama en los pequeños cuadrados representa un sistema o técnica diferente de pensamiento para la comprensión del mundo y sus estructuras… Cada COSMOGRAMA geométrico está hecho para
asistirlo [al alpirante espiritual] en estos intentos de liberación a través de la armonización (pag 15)
Ya sea producto de una cultura oriental u occidental, el mandala circular o diagrama sagrado es una imagen familiar y penetrante a través de la historia del arte. India, Tibet, Islam y Europa medieval los han
producido en abundancia y la mayoría de la culturas tribales los emplean también, ya sea en forma de pinturas o edificios o danzas (pag 16)
Dichos diagramas están con frecuencia basados en la división del círculo en cuatro cuartos, y todas las partes y elementos involucrados están interconectados en un diseño unificado (pag 16)
Muy seguido son de alguna manera cosmológicos, o sea, representan en símbolo lo que se piensa que es la estructura esencial del universo: por ejemplo los cuatro elementos, las cuatro estaciones,
a veces los doce signos del zodiaco, varias divinidades y frecuentemente el hombre en sí (pag 16).
Contemplación de la unidad (ver pag 16)
Esta forma de diagrama expresa la noción de cosmos, que es la de la realidad concebida como una totalidad organizada, unificada (pag 16)
Es este enfoque en el punto inicial de la actividad geométrica lo que separa radicalmente lo que podemos llamar geometría sagrada a la secular o mundana (pag 16)
Geometría antigua comienza con Uno, mientras que las matemáticas y geometría modernas comienzan con cero (pag 16)
El mandala es la división del círculo unitario en las formas comprensibles de cuadrado, hexágono, octágono, eneágono, etc. (pag ????)
La invención del cero permitió que los números representaran ideas que no tenían forma. (pag 19)
Esto señala un cambio en la definición de la palabra ‘ideal’, que en la antigüedad era sinónimo de ‘forma’, e implica geometría (pag 19)
Relación de la aparición del cero con la filosofía y teología, la forma de ver la naturaleza, nosotros mismos y el ambiente (ver más pag 19)
La unidad pierde su primera posición y se convierte en una mera cantidad entre otras cantidades (pag 19)
El cero ha proveído un marco en el pensamiento occidental para el desarrollo del ateísmo o negación de lo espiritual (pag 19)
Ideas como la finalidad de la muerte y el miedo de ella, la separación del cielo y la tierra, todo el rango de filosofías existenciales basadas en la desesperación y absurdo de un mundo seguido por no-ser
debieron mucho a la noción del cero. Nos vimos como individuos separados moviéndose en un espacio que era otra cosa que nosotros, concontrándonos en ese espacio con otros seres separados
de nosotros, otros que nosotros (pag 20)
Música de las esferas (ver más más en pag 22)
Relación de las raíces matemáticas con las raíces vegetales (pag 29)
Círculos superpuestos para construir (ver más pag 33)
La raíz es también la generadora de cambio en el continuo de las siempre en movimiento , irreversibles fases que son parte de la vida orgánica (pag 38)