Hofmann, Albert. Mundo interior, mundo exterior

Hofmann, A. (1997).  Mundo interior. mundo exterior: pensamientos y perspectivas del descubridor de LSD. Barcelona: Los libros de la liebre de marzo.

Sustancias enteógenas (pag 10)

albert Hofmann, Doctor en farmacia y en Ciencias Naturales, miembro de la sociedad Internacional de Plantas (pag 11)

1943 abril: hofmann experimentó por primera vez los efectos del LSD (pag 11)

Las comadronas sabían desde el siglo VI que el uso controlado del cornezuelo del centeno era de gran ayuda para inducir los partos y limitar la pérdida de sangre (pag 12)

LSD: sustancia psicotrópica que transformó el arte, el pensamiento y la vida de nuestra especie (pag 12)

Hofmann se volcó hacia la tarea de abrir nuevos caminos en el ámbito de las sustancias que modifican tan profundamente la percepción que tiene el ser humano de sí mismo y del mundo (pag 13)

Hofmann investigó en el área de arqueología cultural, rastreando sustancias enteógenas hacia la Grecia Clásica (pag 14)

Luego Hofmann experimentó y estudió los principios psicotrópicos de otro especímen vegetal usado en el chamanismo americano con fines visionarios, mágicos y curativos, y verificó que esta sustancia (ololiuqui) no difiere mucho de la LSD (pag 14)

En este libro Hofmann propone una visión de la vida en la que el espíritu y la materia no están reñidos y el egoismo humano aparece como un fruto directo de la ignorancia (pag 16)

dijo: Lo que he obtenido de la LSD lo llevo dentro de mí y permaneciendo en mi entorno cotidiano (pag 17)

El hecho de que hoy nos parezcan evidentes tantas cosas, casi todas, es uno de los errores de nuestra actitud anímica que están más preñados de consecuencias (pag 21)

Los principales problemas que padece el presente se han derivado de la concepción del medio ambiente natural como algo separado del ser humano, como algo objetivo que cabe aprovechar, utilizar de forma ilimitada (pag 26)

Esto ha conducido hasta la crisis ecológica (pag 26)

La nueva conciencia religiosa de unidad del hombre con la naturaleza, y sólo ella, podría conducir hasta las medidas que son necesarias, que son imprescindibles y que implican sacrificios (pag 26)

Podría ocurrir que el valor de las ciencias naturales no resida principalmente en que ellas nos proporcionan la TÉCNICA y, a través de ésta, el confort y bienestar materiales, (pag 26)

sino que su auténtico significado evolutivo consista en el ensanchamiento de la conciencia humana de la maravilla de la creación (pag 26)

Dos enfoques y razonamientos complementarios sobre la unidad del mundo exterior material y del interior espiritual, de las ciencias naturales y de las ciencias del espíritu (pag 27)

Estados visionarios: parecidos a las vivencias espontáneas en las que la imagen familiar del entorno experimenta súbitamente una singular tranformación, aparece bajo otra luz, cobra un significado especial (pag 30)

Hofmann dice que estos son procesos de nuestro interior a los que generalmente se les priva de valor y se expulsan de la memoria (pag 30)

La existencia de una realidad plena de vida, insondable y escondida a la mirada cotidiana (pag 32)

plantas psicoactivas que BAJO DETERMINADAS CONDICIONES son capaces de provocar estados visionarios (pag 32)

Por mundo exterior se entiende todo el universo material y energético al que pertenecemos también con nuestra corporeidad.

Como mundo interior se designa la conciencia humana. La conciencia se escapa a una definición científica, pues se precisa de la conciencia para reflexionar acerca de qué sea la conciencia. Esta puede ser únicamente descrita como el centro espiritual receptivo y creativo de la personalidad humana.

Existen dos diferencias fundamentales entre mundo exterior e interior. Mientras existe un solo mundo exterior, el número de mundos interiores, espirituales, es tan grande como el número de individuos humanos. Además, la existencia del mundo exterior, material, es objetivamente demostrable, mientras que el mundo interior representa una mera experiencia espiritual subjetiva.

Y ahora, la definición de la realidad que consideramos aquí. No es una realidad trascendental ni tampoco una realidad de la física teórica, que sólo fuera expresable con el auxilio de fórmulas matemáticas, sino la realidad que se designa cuando se utiliza este concepto en el lenguaje cotidiano. Es el mundo como totalidad, tal como los seres humanos lo percibimos con nuestros sentidos y lo experimentamos como seres con espíritu, y al que pertenecemos nosotros mismos con nuestra existencia corporal y espiritual.(pag 33)

diferencias entre mundo exterior y mundo interior: (pag 33)

existe un solo mundo exterior y el número de mundos interiores, espirituales, es tan grande como el número de individuos humanos (pag 33)

la existencia del mundo exterior, material, es comprobable, mientras que el mundo interior representa una mera experiencia individual subjetiva (pag 33)

En el espacio exterior (exterior a un humano) no existen los colores, lo único que existe objetivamente de un objeto de colores es exclusivamente materia que emite vibraciones electromagnéticas de diferentes longitudes de onda (pag 36)

No puede comprobarse si ante una determinada longitud de onda todos los seres humanos tienen idéntica vivencia cromática (pag 37)

El mundo de los colores, tal como lo vemos, no existe fuera objetivamente, sino quese origina en la pantalla psíquica de cada hombre (pag 37)

la percepción de color es un acontecimiento puramente psíquico y subjetivo que tiene lugar en el espacio interior de un individuo (pag 37)

capacidad cognoscitiva del ser humano (pag 39)

El mundo que percibimos con nuestros ojos y con los demás órganos sensoriales constituye una realidad recortada únicamente a la medida de los seres humanos (pag 40).. en páginas anteriores explica que es poca la gama de ondas físicas captadas por el humano

Las abejas, que poseen antenas visuales que reaccionan a longitudes de onda situadas en la zona ultrarroja y ultravioleta des espectro, ven colores que no existen para nosotros (pag 40)

La metáfora de la realidad como el producto de un emisor y un receptor pone de manifiesto que la imagen aparentemente objetiva del mundo exterior, que designamos como realidad, es de hecho una imagen subjetiva (pag 41)

¿por qué? Porque la pantalla (buscar más precisa explicación de esta pantalla) no se encuentra fuera, sino  en el espacio interior de cada ser humano (pag 41)

 

Capítulo El sentimiento de seguridad (pg 70 versión digital)

Todos los estados de felicidad tienen como base la seguridad en el sentido más amplio de este concepto. Se conoce la dicha de la seguridad en el hogar paterno, en la familia, en una amistad. Igualmente, la pertenencia a pequeñas o grandes comunidades de índole profesional, política, cultural o religiosa puede proporcionar un sentimiento de seguridad que va unido a la felicidad. Al contrario, la infelicidad va unida las más de las veces a indefensión, separación, extravío. (p 73 versión digital)

Acaso sea la entrada en este nuevo nivel de conciencia lo que se refiere en la parábola bíblica del pecado original. El cumplimiento de la promesa de la serpiente —«seréis como Dios, conocedores del bien y del mal»— escindió en la conciencia humana la unidad de creación y criatura. Con la nueva capacidad que se le había otorgado de discernir y de conocer conscientemente, el hombre se convirtió en señor responsable de su acción, pero perdió con ello la seguridad que había consistido en la unidad inconsciente con la creación. Esta fué la expulsión del Paraíso. (p 76 versión digital)

Requisito y base para un cambio positivo de rumbo tendría que ser la curación de la «neurosis fatalista europea», como Gottfried Benn ha denominado la escindida conciencia de la realidad. En la conciencia colectiva tendría que revivir una concepción de la realidad en la cual el individuo no se autopercibiera como separado del mundo exterior, sino como una misma cosa con la creación. (p86 versión digital)